Vocación
¿Y si Dios te llama? ¿Y si en tu corazón estás sintiendo que el Señor te quiere para que camines a su lado en la radicalidad de la vida religiosa? Si estás buscando un lugar donde seguirle y has llegado a nuestra página, aquí tienes una pequeña presentación de nuestra vida. Y en las demás secciones de esta web puedes encontrar más concretamente a qué nos dedicamos. Esto puede servirte para introducirte, pero si te interesa algo más en concreto, ponte en contacto con nosotras.
Las etapas para discernir
Aspirantado
¿Tienes inquietud vocacional? ¿Has pensado en entregarte a Dios pero no estás segura todavía? El aspirantado es la primera de todas las etapas. Lo forman las chicas que, mientras trabajan o estudian fuera del Instituto, están discerniendo la vocación, acercándose a algunas actividades y eventos, pasando tiempo con nosotras. El objetivo es ir conociendo a la comunidad y nuestra forma de vivir.
Noviciado
El noviciado comienza con la toma de hábito. En esta etapa, se inicia propiamente la vida en el Instituto y su finalidad es que la novicia conozca mejor la vocación divina, particularmente la propia del Instituto. La formación gira alrededor de los consejos evangélicos que se han de profesar. Actualmente el noviciado está en nuestra comunidad de Cuenca (España) y tiene una duración de dos años.
Postulantado
Si Jesús te llama y quieres comenzar el camino, puedes pedir la admisión en el Instituto escribiendo una carta a la Madre General. Durante esta etapa, la postulante vive en una de nuestras comunidades como una hermana más. El tiempo del postulantado es de uno o dos años. Si después de este tiempo quieres continuar en el Instituto, el paso es pedir el ingreso al noviciado.
Juniorado
El noviciado concluye con la profesión temporal, momento en el que comienza el juniorado, cuya finalidad es completar la formación inicial y conducir a las Hermanas a una realización madura del compromiso definitivo. Las junioras suelen ser enviadas a una comunidad diferente a la del noviciado y allí realizan estudios eclesiásticos o civiles. Todo el juniorado está dirigido a la Profesión Perpetua.
Profesión perpetua
«Urgida por el amor de Cristo y con el deseo de seguirlo más de cerca...» Con la profesión perpetua la hermana se consagra definitivamente a Jesucristo y y el Instituto para siempre.
La experiencia de una
novicia
La hermana Raquel, novicia del Instituto, nos cuenta cómo es su vida en el noviciado. Es un momento clave para la configuración de la vocación y de la pertenencia a las Esclavas Carmelitas de la Sagrada Familia.
El día a día de una
juniora
La hermana Paula nos cuenta cómo es su día a día en su comunidad en Bornos (Jerez de la Frontera). ¿A qué se dedica una hermana 'en formación'? ¿Para qué se prepara? Ella nos lo cuenta.
¿Quieres preguntarnos?
Hay una hermana encargada de hablar con las chicas que están interesadas en conocer el Instituto y de hacer con ellas un proceso de discernimiento. Puedes pedirnos más información, hablar con alguna de nosotras, venir a vivir algunos días a una de nuestras casas. ¡No tengas miedo!