¿Qué pasaría si todos los días ofreciésemos alegría, ternura, amabilidad, comprensión, esfuerzo, agradecimiento….?
¿Qué pasaría, sí todos los días tomásemos parte activa en la defensa de las injusticias, de los pobres, los niños, los enfermos, los inmigrantes, los ancianos y los millones de mujeres y hombres que sufren desesperanza, incertidumbre, desconsuelo y miedo?
¿Qué pasaría si todos los días saliésemos pensando en los demás más que en nuestras necesidades del día a día? ¿Qué pasaría si nos dejásemos llevar, colaborando en todo lo que acontezca en ese día, dando lugar privilegiado al otro y su historia personal?
Pues…..simplemente, que Jesús andaría de nuevo suelto por el mundo…
Estrella González Vega, Cantalejo (Segovia).
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